Santo Domingo.- Desde un “jengibrito” en familia, un trago con los amigos, hasta una fogata en medio de la calle, son algunas de las cosas que demuestra que los dominicanos son los que mejor y más celebran la navidad en todo el mundo.

Se dice que los dominicanos viven en una fiesta constante, ya que viven de fiesta en fiesta no importando el motivo o si tienen o no, suficiente dinero para hacerla.

Una muestra de ello lo constituye la fiesta constante que viven los residentes del sector de Capotillo, donde todo el mes de diciembre se celebra “en grande”.

“La celebración comienza con el inicio del tiempo de adviento a principios de diciembre. Se hacen retiros espirituales, confesiones, y alabanza a Dios. Después de esa preparación, se realizan los aguinaldos con toda la comunidad. Salimos en la madrugada cantando villancicos navideños y termina con un compartir con jengibre o chocolate en una de las casas del barrio” asegura el padre Wilfredo Montai, de la Parroquia Santa Clara de Asís, del referido sector.

Luego de esto, señala Montai, el 22 de diciembre, se hacen los “encuentros navideños”, que consiste en reunirse todas las noches en una casa diferente por varios días y finaliza con un compartir en la parroquia con intercambios de pequeños regalos y una cena donde cada uno debe llevar un plato de comida diferente.

“Ya para el 23 se hace la caja de solidaridad, que consiste en que durante todo el año se hace una evaluación de las familias más necesitadas de la comunidad y se reúnen donaciones de comida, ropa, y otras cosa y se le lleva a la familia pobre que se elige. Para el 24, hacemos la misa de noche buena. Simbólicamente, ponemos al niño Jesús en el pesebre. El 25 celebramos la fiesta de navidad, que es el nacimiento de Jesús. Hacemos la misa en la mañana y en la noche se hacen aguinaldos en las calles”, agrega Montai quien tiene nueve años como párroco en dicha iglesia, y asegura que la gente participa mucho de las actividades que se realizan en la época navideña.

Para finalizar la celebración, el 31 se celebra la misa de fin de año y esperan “el cañonazo en la iglesia”, a las 12:00 de la noche los feligreses se retiran a sus casas para seguir la celebración.

Este es solo un ejemplo de la gran cantidad de maneras en que el dominicano “vive y goza” la Navidad.

En esta época, además, las familias aprovechan para compartir un momento agradable, y estar juntos ya que muchos duran meses y hasta años para reunirse.

Hay algo muy curioso en la celebración de la Navidad en República Dominicana, y es que a la hora hacer la famosa cena navideña, que regularmente se realiza el 24 de diciembre pero muchos la hacen el 31 también, existe una diversidad de platos que se preparan para la gran celebración en familia.

Algunos de los más famosos son el cerdo “a la puya” que no puede faltar en la fiesta, el pollo o pavo horneado, el arroz con gandules, espaguetis, pasteles en hojas, pastelitos, bacalao, ensaladas de todo tipo y con todos los ingredientes, entre muchos platos más.

Por: María Luisa López.