Chicago (Notimex).- En una carta emotiva escrita a sus hijas, el presidente electo Barack Obama asegura que buscó dirigir esta nación porque desea para ellas y para todos los niños de Estados Unidos "un mundo sin límites a sus sueños".


En la misiva, publicada esta semana por la revista Parade, con fotografías del próximo mandatario y su familia, Obama pide a Malia y Sasha comprometerse en trabajar por su país.

Mencionó que esta aspiración la obtuvo de su abuela materna, "ella me ayudó a entender que Estados Unidos es grande, no porque sea perfecto sino porque siempre puede ser mejor, y que el trabajo inacabable de perfeccionar nuestra unión corresponde a cada uno de nosotros".

Este, precisa, es un cargo que pasamos a nuestros niños, "y espero que ambas tomen ese trabajo, corrigiendo los errores que ven y trabajando para dar a otros las oportunidades que ustedes han tenido".

Indicó a sus hijas que ellas tienen no sólo la obligación de regresar algo a este país, sino por sí mismas, "porque sólo cuando enganchen su carro a algo más grande que ustedes, explotarán su potencial verdadero

En la carta, titulada "?Qué quiero para ustedes y para cada niño¿", Obama se expresa como un amoroso padre y les agradece a sus hijas su paciencia, equilibrio, tolerancia y humor en su preparación para vivir en la Casa Blanca.

Reconoció que en los dos pasados años de campaña electoral les hizo falta a las pequeñas, y aunque las vio divertirse en familia, incluso probando comida chatarra, no fue fácil ni para ellas ni para su madre.

"Ni lo emocionadas que están por ese nuevo perrito compensa todo el tiempo que hemos estado separados", aclaró el mandatario electo.

Afirmó que aspira a que todos los niños estadunidenses tenga las mismas oportunidades de aprender y de soñar y de crecer y de prosperar que sus hijas tienen.

"Quiero que todos vayan a escuelas dignas de sus potencial, escuelas que los desafíen, los inspiren, e inculquen en ellos un sentido de lo maravilloso que hay en el mundo alrededor de ellos", puntualizó.

Quiero, agregó, que tengan la oportunidad de ir a la universidad aún si sus padres no son ricos. Y consigan buenos trabajos, bien pagados y que les permita pasar tiempo con sus propios hijos, así como jubilarse con dignidad.

También desea impulsar la investigación para que sus hijas puedan ver nuevas tecnologías e invenciones que mejoren la calidad de vida y hagan el planeta limpio y más seguro.

Y quiero empujar nuestros propios límites humanos para alcanzar más allá de las divisiones de raza y región, de género y religión que nos permitan ver lo mejor en cada otro".

Justificó, además, la participación en guerras de las fuerzas armadas, como una forma de proteger a los Estados Unidos, "pero cuando lo hacemos, quiero estar seguro de que esto es sólo por una razón muy buena, que intentamos nuestro mejor esfuerzo para superar nuestras diferencias con otros métodos pacíficos".

Concluyó reconociendo que esa visión de igualdad que espera que sus hijas sigan, la aprendió de su abuela.

Esa fue la lección que intentó enseñarme cuando tenía la edad de ustedes, leyéndome líneas de la Declaración de Independencia y contándome sobre los hombres y mujeres que marcharon por la igualdad porque creyeron que esas palabras, puestas en el papel hace dos siglos, deben significar algo".