Santo Domingo.- El dirigente del Partido Reformista Social Cristiano(PRSC), Francisco Rondón, denominado "sangre nueva", lamentó que esa organización política no haya podido ponerse de acuerdo, ya en plena navidad para llevar un “reformista valioso”, que los hay, para que encabece la boleta presidencial en las elecciones del 20 de mayo próximo.
Rondón, expresó su pesar y descontento con la alta dirigencia, encabezada por su Presidente, Carlos Morales Troncoso, quien afirmó es el mayor culpable de la situación que está pasando el PRSC.
Dijo que indiscutiblemente ese lujo solo podía dárselo el Doctor Balaguer, de salir de último como candidato y llegar primero cuando se contaban los votos.
Es injusto lo que están haciendo con la esperanza de los reformistas de corazón, eso no tiene explicación, después de la muerte del líder y fundador de ese instrumento de la democracia, nunca el PRSC esperaba la navidad sin tener su candidato presidencial. “Eduardo Estrella y Amable Aristy salieron proclamados en el mes de agosto respectivamente” del año preelectoral (2004-2008).
Asimismo, señaló que el Presidente Leonel Fernández y su candidato presidencial Danilo Medina han cometido el error político, de no querer que PRSC se fortalezca, para pretender absoverlo como en otras elecciones, pero las cosas no están a su favor en está ocasión, ya que los reformistas y la población en sentido general esperaban un reformismo independiente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
En consecuencia la mayor parte de los dirigentes que cuentan con liderazgo en esa organización se irán con el candidato presidencial del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Hipólito Mejía, que en sus inicios en política era reformista, y en estos momentos se sienten más identificado con éste. Aseguró que si Danilo Medina no cuenta con el apoyo real de Amable Aristy Castro, Ito Bisonó, Héctor Rodríguez Pimentel, Danny Perdomo, José Enrique Sued y Eddy Alcántara, se llevará un saco vacío a las urnas, puntualizó.
Francisco Rondón, sangre nueva del PRSC.
