La Pequeña Habana, Florida.- CON EL AUSPICIO del tribuno por excelencia doctor Luis Manuel Campillo y su esposa Rosa Campillo el Senador dominicano Amable Aristy Castro convocó a un referéndum donde la tendencia a favorecer a Hipólito Mejía como era esperado se ha dado. Aristy Castro solo espera llegar a Nueva York para arropar su venia a favor de Hipólito.

El evento, como acostumbra Amable fue realizado en un conocido restaurante dominicano donde la picadera es algo finisecular y ya se ha hecho famosa la Picadera Reformista que está contenida en pedacitos de quesito rojo, salami, morcilla, longaniza y sabroso tostones de color rojizo para darle el matiz reformista al asunto. Además el famoso mabí rojo realizado con verdadera textura navarreteana.

El conteo de los votos fue algo natural, porque los presentes todos sabían que Hipólito iba a ganar debido a que la mayoría que agrupa Amable son las tropas de los generales que se quedaron en el campo de batalla, según afirmó uno de los asistentes, Johnny Castillo.

Allí estuvieron el jurídico Fausto Marte, Julio Mateo, Johnny y Santa Castillo, Luis Fernández y dentro de los periodistas estaban los antiguos dirigentes reformistas Fernando Puesán,  Eduardo Read y Edwin Abreu el muchacho de la Falconbridge que ahora guarda filas con el hombre del Toro y del Jacho.

Como todos saben, Amable con su estilo franco y llano espera ser uno que se lleve toda la tropa del reformismo y así aniquilar a los generales. Se dice que ni en la batalla de Palo Seco habrá mas sangre que en la que se avecina. Aunque muchos esperan y organizan la revolución de los sargentos. Las otras tropas se encuentran con el General Héctor Rodríguez Pimentel que también se rumora para su fatalidad histórica que caerá en brazos de Hipólito. Lo que se estila que ambos dirigentes deben de estar bien seguros de que el PRD ganará las elecciones porque de lo contrario en la otra bancada le tienen preparado majarete del bueno a ambos Generales disidentes.

Aristy Castro se pavoneó de la grande amistad que tienen con Hipólito Mejía.

Antes de tomar el avión y con un recorte de cabello al estilo higüeyano, dijo que está con todos y para el bien de todos.

Amable no quiso decir si su postura será blanca o morada porque hasta que el huevo no se encube bien no puede haber postura saludable. En este momento Amable llega a Nueva York. Cafebambú vaticina de antemano que será abrumadora la votación a favor de Hipólito Mejía en la Cloaca de Concreto. Y casi es seguro que el huevo cloacal sea blanco.

Al salir del restaurante vio que había un señor haciendo guardia cuidando el flanco. Horondo fue Amable a darle las gracias al señor cuando de repente el hombre se envalentonó y le dijo, “que bueno es así ustedes comiendo picadera Reformista y yo aquí aguantando frio e insultos...”. Amable, sorprendido le preguntó ¿y quién es usted? Mire, Don Amable y ¿Cacoepelota Castillo no le dijo quien yo soy? Pues apréndaselo de una vez y por todas, yo soy Cara de Coco Vázquez, su seguro servidor. Amable que había salido con su rostro adusto de la reunión, estalló la risa diciéndole, le prometo que si tengo otro hijo le voy a poner ese nombre en memoria suya. A lo que Cara de Coco le respondió: “Mejor póngale Prometo que eso es lo de ustedes los políticos. Toda la vida se la pasan prometiendo buen azaroso.” Al escuchar esas palabras Amable arreció el paso y dijo despidiéndose, “me voy de aquí antes que el espíritu de Hipólito me salga aquí en plena calle ocho”.