La guerra desatada en un partido muy querido por nosotros, el cual llevamos tan adentro como a los Tigres del Licey, nos hizo tomar la decisión de ir a la exhibición de los botes y comprar uno. Sí, así como lo acaban de escuchar. Pero no es el bote que ustedes están viendo ahora sino el que se encuentra cuando ustedes pinchan “leer más”.
Ustedes no se imaginan lo que se siente cuando nosotros escuchamos que se “lambieron al Presidente de la Filial de Miami, aunque sea de manera provisional” o “que en la lucha sin cuartel, Lucho dará de baja al Dr. Campillo” o “que Max Ariza anda con su M.R. 4.5 disparando a diesta y siniestra” o “que el Jurídico está en un proceso de recuperación y solo le queda amagar y no dar, dar sin reír, un pellizquito y no poder huir.
A un americano se le ocurrió la idea de pintar botes para aquellos que no tienen el suficiente dinero para comprar uno de verdad. Aprovechamos la oportunidad y nos compramos uno. Miren eso.
Ustedes no se imaginan lo que se siente cuando nosotros escuchamos que se “lambieron al Presidente de la Filial de Miami, aunque sea de manera provisional” o “que en la lucha sin cuartel, Lucho dará de baja al Dr. Campillo” o “que Max Ariza anda con su M.R. 4.5 disparando a diesta y siniestra” o “que el Jurídico está en un proceso de recuperación y solo le queda amagar y no dar, dar sin reír, un pellizquito y no poder huir.
A un americano se le ocurrió la idea de pintar botes para aquellos que no tienen el suficiente dinero para comprar uno de verdad. Aprovechamos la oportunidad y nos compramos uno. Miren eso.