
Dijo que no se correspondía a personas llamadas civilizadas tratar de coartar el derecho a la libre expresión que la protege la Constitución de la República Dominicana. Asimismo, manifestó que muchas veces en la práctica, se ha deformado el espíritu de la Constitución y se ha pensado en aclarar una reforma constitucional fundamental que permita evitar la repetición de tristes excesos en el gobierno de la nación, pero que en este caso volvemos a utilizar la constitución para beneficios partidistas o de grupos mal sanos que no le hacen ningún favor ni a la Constitución ni al país.
Raimundo, además, dijo que si se definía la libertad de prensa como la existencia de garantías con las que los ciudadanos tengan el derecho de organizarse para la edición de medios de comunicación cuyos contenidos no estén controlados por los poderes del Estado. Entonces solamente un gobierno de corte dictatorial trataría de cercenar de cuajo ese derecho garantizado por la Constitución del país.
Raimundo dijo que la República Dominicana no es un estado socialista y que no mira con buenos ojos las bambalinas de ciertos representantes del pueblo que quieren solapadamente meter el concepto de prensa socialista en el país. Según Raimundo dentro de ese mundo, la prensa se planifica aparte de los criterios de beneficio por lo que se deduce del capital de la economía nacional, considerado como producto social, para asegurar el "derecho positivo" a la libertad de prensa para todos los ciudadanos mediante la participación popular unificada en todos los medios de comunicación existentes regulados ‘democráticamente” por el Estado. En otras palabras, según dijo, se quiere amordazar a los diarios, medios, gremios de prensa para ir metiendo a canana forzada los conceptos para antes de matar amordazar a los que ejercen ese derecho libérrimo que se ha logrado a palo y a tentetieso.
“Nosotros no tenemos que abdicar nuestra posición, porque es un derecho que nos da la Constitución de la República ganado por los esfuerzos de grandes consultas nacionales e internacionales y que redimen al hombre de la esclavitud de los intereses creados”, dijo.
Raimundo afirmó que así comenzó Fidel Castro en Cuba cercenando la Libertad de Prensa en ese país convirtiéndolo en una mazmorra nacional y ahora el pichón de tiranuelo llamado El Guerrero Inmarcesible de Venezuela quiere hacer lo mismo. Es vergonzante de que en nuestro país personas que no tienen nada que ver con el mundo periodístico sometan proyectos de leyes para coartar todo el derecho que tienen los gremios en la NACIÓN DE DUARTE. Hizo un llamado a todos los periodistas de que no se olviden que “cuando vean la barbar de tu vecino arder pon la tuya en remojo.”
Esta es una lucha de todos y no solamente de unos cuantos periodistas, para que luego no tengamos que lamentarnos amargamente, puntualizó.
