¿Haz escuchado el término "metro-sexual"? Aunque muchos lo definen como "estar a un metro de la homosexualidad" el concepto metro-sexual tiene una definición que va acorde con las nuevas tendencias de la masculinidad. El hombre hoy en día está más abierto al cuidado de su imagen sin observar las barreras de la feminidad que obstaculizaban su desarrollo acorde con los tiempos. La metro-sexualidad fue definida y explicada por Mark Simpson desde 1994, pero su popularidad arrancó a principios del siglo XXI. El capitalismo y el consumismo contextualizan al hombre metro-sexual y lo hacen un animal del mundo fashion. Una tarea difícil de la nueva masculinidad es la de romper las barreras del hombre cavernícola que presidía los hogares del mundo.
Simpson inventó el término en búsqueda de una explicación del hombre moderno. Yo, buscando una denominación para los hombres y mujeres corruptos modernos, tomé prestado su prefijo y he decidido llamarlos: metro-corrupt@s.
¿Cuál es el perfil de los metro-corrupt@s? ¿Cómo identificamos a un/a metro-corrupt@? Sencillo; aquí algunas actitudes, elementos y señales que pueden ayudarlos a identificar a estos nuevos personajes de la historia:
- La actividad corrupta se para en la puerta de sus empresas; son unos maleantes en instituciones estatales, u otras empresas que no les pertenecen.
- Invierten en edificios donde un rey, un presidente o alguna figura de poder haya dado el primer picazo, o lo donan para campañas políticas esperando recibir a cambio poder.
- El metro-corrupto se olvida de que quien está en su mesa comiendo o bebiendo desfalcó al país completo y choca su copa sin importarle ni eso ni las palabras del brindis.
- Los carros del metro-corrupt@ pueden haber sido adquiridos con la exoneración de impuestos de algún legislador, o pagada cash con su dinero adquirido de manera ilícita; evidentemente, aquel vendedor de autos que le reciba el dinero de esa manera es otro metro-corrupto.
- Para el metro-corrupto evadir impuestos no es una falta grave. Sé que pueden argumentar sobre este punto que en la RD el ciudadano común aún no entiende sobre la importancia de la contribución fiscal para el desarrollo. Sin embargo, me consta que la ciudadanía evade impuestos como una forma de vengarse del Estado corrupto que no le devuelve sus contribuciones con servicios públicos de calidad, a sabiendas de que no están cumpliendo con su responsabilidad.
- Seguimos. El metro-corrupto apoya al candidato presidencial que le ofrezca el mejor y más grande pedazo del pastel, sin importar quien sea o los antecedentes del candidato.
- La metro-corrupción apoya un reclamo social porque va a debilitar la imagen del partido con el cual rivaliza.
- El metro-corrupto es pasivo a la hora de recordar lo mal hecho.
- La metro-corrupción no reconoce a los demás corruptos porque son sus cómplices. Se hace de la vista gorda a la hora de castigarlos.
- La participación de la ciudadanía para el metro-corrupto se resume en: darle demasiada importancia a lo que digan los 'civiles'.
- El metro-corrupto le cobra más caro al Estado que a cualquier otra empresa o persona.
- El que trabaja para metro-corruptos, que también es metro-corrupto, asigna obras que deben ir a concurso, a personas físicas o a familias para ayudarlos a salir de sus penas o de sus situaciones económicas difíciles. Total, ese dinero no es de él, es de todos.
- El metro-corrupto se come los cheques, no va a trabajar y aún así se siente orgulloso de que cobra y trabaja en otro lugar.
- El metro-corrupto no se considera ciudadano en primer lugar: en primer lugar es corrupto, en segundo lugar 'dios' y en tercer lugar, solo si le conviene, se considera 'un buen padre de familia' o un simple 'ciudadano de a pie'.
Sé que para cuando estén leyendo estas líneas se habrán dado cuenta de que estos son actos de 'corrupción' pura y simplemente. Pero no sé, se me ocurrió que a lo mejor escribiendo sobre un nuevo 'trend' (tendencia) evitaríamos la desensibilización de la ciudadanía frente al tema y vuelve a estar moda con un ligero cambio en su denominación. No quisiera que esta problemática nos resbale. ¡Síganme la corriente!
Los invito a que los identifiquen en su círculo. ¿Recuerdas cómo se juega 'cepillo'? ¡Perfecto! Entonces juega a: METRO-CORRUPTO, a ver quién gana más puntos en una fiesta, en un 'mitin', bar, restaurant, o donde sea.
Por: Crystal Fiallo Scanlon.
Fuente: http://www.acento.com.do