A veces nos preguntas por qué hacemos algo?, y la mayoría de las veces, ni nosotros mismo tenemos las respuestas. Es bueno pensar que nos impulsa el amor, la fe y quizás el deseo de que al cabo del tiempo y mirando hacia atrás, podamos decirnos yo fui parte de esa obra.

En los pasados tres días visité una de las misiones bajo la responsabilidad de la Parroquia de Corpus Christi ya terminada y de pronto recordé de que solo la Misión a la Virgen de la Altagracia sigue sin construirse y sentí pena, pero a la vez renové mi compromiso de hacer todo lo que esté a mi alcance para que un día pueda ver terminado lo que será el primer Santuario dedicado a la protectora del Pueblo Dominicano fuera de la República Dominicana que tanto quiero y de la cual me siento orgulloso de ser hijo.

Sé que algunos de ustedes quizás esto no les importe, pero a mi si al igual que a un grupo reducido de dominicanos y hasta uno que otro hermano latinoamericano, pues como dominicano que soy me duele ver como nosotros cuando hay merengues, bachatas y romo, salimos corriendo a pasarla bien”. Para nosotros los dominicanos no hay tiempo difíciles cuando “hay que bucar cuarto pa’beber romo” sin embargo para ayudar a construirle una casa y un centro cultural a nuestra madre espiritual “TAMO ARRANCAO Y LA COSA TA’MALA”.

Cuando usted termine de leer este email y si en verdad se siente Dominicano, tome un momento y examínese, piense cuantas veces al día invoca usted a la Virgen de la Altagracia para que lo ayude y entonces quizás se dará cuenta lo mucho que ella nos da. Nosotros somos, personas cariñosas, trabajadoras y alegre, somos médicos, abogados, empresarios exitosos, comunicadores, somos artistas de renombre, somos peloteros de grandes liga, personas humildes, somos el único país con un color de piel que nadie más tiene, somos color indios. Y me pregunto, ¿Entonces porque somos tan tacaños cuando tenemos que abrir nuestras manos para ayudar a construirle la casa a la madre de Dios? Si alguno de ustedes tiene una respuesta para esa mi última pregunta, por favor mándame un email, me gustaría leer esa respuesta. Si te siente dominicano como Yo, entonces reenvía este email a cuanto dominicano conozcas en Estados Unidos o en el exterior, déjale saber que todavía no se construye el Santuario a la Virgen de la Altagracia en Miami, porque somos tacaños y no queremos gastar lo cuarto del romo en una casa para nuestra madre. En cambio si quieres ayudar, todavía estas a tiempo.

Manda un sobre con tu donación deducible de impuestos a Santuario de Nuestra Señora de la Altagracia, al 1779 NW de la 28th Calle (frente al Parque Juan Pablo Duarte) o ven a escuchar la misa todos los domingos de 9:30 de la mañana. Tambien, misa en la Parroquia de Corpus Christi en el 3220 NW de la 7th Avenue, Miami, Florida 33127.

O visita la página de internet www.fdcaltagraciausa.org y hazte miembro voluntario de esta fundación sin fines de lucro. SI LOS DOMINICANOS NOS UNIMOS COMO HERMANOS, JUNTO PODREMOS VER TERMINADA ESTA OBRA.

Dios y la Virgen de Altagracia te bendigan.

Fatimo Garcia
Miami Florida